Este pudding es una manera fácil y rápida de aprovechar los croissants que se nos han quedado secos y ya no suelen ser agradables de comer. La textura es deliciosa y se puede comer tanto templado como frio. Para este pudding he usado unos croissants pequeños rellenos de chocolate.
PUDDING DE CROISSANTS
6-8 croissants pequeños
250 ml de leche
2 cucharaditas de harina de maíz
1 cucharadita de vainilla
2 huevos
2 cucharadas de azúcar
Azúcar glasé para decorar
Untar con un poco de mantequilla el molde para hacer el pudding y repartir los croissants en él. En un bol batir bien los huevos y el azúcar. Añadir la harina de maíz, la leche y la vainilla y volver a batir hasta que todo se incorpore bien. Verter la mezcla sobre los croissants.
Con el horno precalentado a 160º hornearlo durante 30 minutos o hasta que al pinchar con un palillo, este salga limpio.
Dejar templar y enfriar en nevera. Antes de servirlo espolvorear con azúcar glas.