Pan del emperador, Kaisersemmel, pan del Kaiser o rosetones. Todos estos son los nombres que reciben estos panecillos tan singulares. Su origen comienza en el 1900 en Austria durante el reinado del emperador Francisco I . Se comenta que en sus orígenes solo lo elaboraban los panaderos que poseían mucha experiencia debido al manejo de la fermentación controlada. Hoy en día son muy populares y ya no son un secreto para nadie.
Su nombre se debe a la forma que tiene de corona imperial marcada por los cinco pliegues.
Desde que los hice por primera vez como reto del Comando Panarra de Daniel Jordá , se han convertido en un imprescindible cuando en casa se cena hamburguesas. Y es que son fáciles de realizar y sobre todo quedan fantásticos, con una miga blandita y suave. Si probáis a hacerlos ya no compraréis más pan para hamburguesas de panificadoras…
500 gr de harina de fuerza
10 gr de sal
20 gr de levadura fresca
20 gr de miel o agave o jarabe de caña
2 huevos grandes
50 gr de aceite
250/300 ml de agua
semillas de amapola o sésamo (para decorar)
Amasar todos los ingredientes.
Dejar reposar tapado hasta que doble el volumen
Cortar piezas de 70/80 gr. Bolear dando forma al panecillo. Cortar con unas tijeras una cruz en la superfície o bien intentar dar forma como se muestra aquí
Dejar doblar el volumen.
Pintar la superficie , con cuidado, con una mezcla de huevo y leche antes de entrar al horno y poner unas semillas de sésamo o amapola para decorarlos.
Cocer en horno precalentado a 220º durante 10 minutos.
Dic 13, 2015 @ 16:12:54
Delicious!
Dic 22, 2015 @ 09:18:16
Desde luego que una hamburguesa o un bocadillo de jamon con ese pan no tendrá comparación.
Buen provecho.
Besos y feliz Navidad para ti y los tuyos.
Chary 🙂